lunes, 10 de diciembre de 2012

Este es un castillo alemán !!

Ya llegan las Navidades y este año el cual espero que sea el último he decidido ir a ver los mercaditos navideños. Primero he ido a ver el de Colmar que está a una hora de mi casa y me encantó. Una ciudad muy linda y colorida. El mercadillo se repartía por toda ciudad que estaba repleto de personas era imposible hasta caminar, pero lo disfruté mucho.  La semana siguiente fui a ver el de Nüremberg como está a más de cuatro horas ya me quedé a pasar el fin de semana allí. El mercado también era muy grande y concurrido por lo que el primer día sólo tuve tiempo de visitar el mercadillo y poco más. Al día siguiente ya me concentré más en  ver la ciudad. Por la mañana me dirigí al castillo que no estaba muy lejos del mercadito en la plaza principal pero la cuesta era de padre y muy señor mío y parecía no terminar nunca. Cuando llegue arriba al castillo aún había más cuesta hasta llegar a la entrada. Una vez allí me dirigí a la taquilla. El tipo de taquilla me dijo que la entrada incluía una visita guiada al palacio pero que no me preocupara porque aunque la charla era toda en alemán podía pasear por mi cuenta. No me lo pensé y me compré la entrada. Al salir, intento  entrar al palacio y nada totalmente sellado, pues no se podía entrar sin el guía. Pregunto por allá y me dicen que tengo que esperar en la cola. Espero, y cuando se hace un grupo bastante abundante aparece un hombre que intuí que era el guía y nos dejó entrar. Entramos en una sala vacía con paredes blancas. Cuando entramos todos,  el hombre que efectivamente era el guía, nos pregunta en ingles: ¿bueno de aquí quien no sabe alemán?. Yo y otro grupo de españoles y chinos levantamos la mano. Por lo que nos responde muy amable él: Pues os habéis equivocado de castillo!!. Este es un castillo Alemán y se pone a explicar el rollo a los alemanes. Bueno, yo pensé si puedo andar por mi cuenta pues sin problema. Justo pensar eso la familia chinal se va a una ventana a hacer fotos al exterior del castillo, cuando de repente el guía se pone a gritar en inglés: No quiero que os separéis del grupo, estoy haciendo mi trabajo. Los españoles estallaron en risas entre ellos y la familia chinal se acercaron avergonzados. Poco después otro despistado como yo pues no hay ninguna indicación abre la puerta desde fuera que daba a la sala la misma que intenté abrir yo pero se ve que este hombre tenía más maña. Asomó la cabeza y por lo que se ve no le debió gustar lo que vio porque dio dos pasos y enseguida dio media vuelta para marcharse. Pero sin tiempo a reaccionar mi guía se puso a correr detrás de él, el hombre asustado se paró y el guía le salta en inglés no se puede dejar la sala sin el guía. El hombre se disculpó y el guía acabó cerrando la puerta. Nuestras caras eran poemas tanto las de los inmigrantes como la de los locales. Cuando se quedó a gusto volvió a su posición y prosiguió su charla.  Después de quince minutos interminables de cascar, y eso que la sala estaba vacía no se que tendría que explicar tanto, en fin el hombre decide llevarnos a una capilla enana que lo único que tenía era un retablo en la pared y un Cristo pequeño al frente. El hombre seguía dando la bara... perdón la charla y yo apoyada sobre la pared que daba el Cristo. Cuando me ve que tapaba al Cristo vuelve a su sonata, muévete que no ves que no ven al Cristo !!. Y digo yo si hasta el de mi pueblo es más grande. En fin con la paciencia que caracteriza a un budista o alguien que vive en Alemania y no acaba tirándose por la ventana, me aparto. Otra vez los españoles murmuraban y sonreían entre ellos. El hombre volvió con su charla. Y los chinos totalmente aburridos se apartaron lo justo para que no les volviera a echar la bronca y se pusieron a hablar vete a saber qué. Cuando se gira el hombre vuelve a gritarles silencio por favor, aquí estoy trabajando por favor déjame hacer mi trabajo. Los españoles ya en carcajada limpia. A mí ya ni frio ni calor pues ya son casi 3 años. Al menos no le tapaba al Cristo. Después de otros aburridísimos 10 minutos explicando las tallas de madera y el Cristo que era lo único que había gracias a dios porque vaya tostón nos hace salir a la calle. Había empezado a nevar y el tiempo no parecía dar tregua. Cuando salimos nos lleva a una habitación enana y un pozo que según me pareció oír superaba los 15 metros. Y otra vez se puso a largar debía tener mucha historia el pozo porque vaya tostón.

Ahí  casi 40 minutos para enseñarnos una habitación blanca, una capilla pequeñísima y un pozo. En fin quedé un poco decepcionada, y justo salir del pozo la nieve no parecía haber menguado todo lo contrario empezaba a nevar con muchísimas ganas.   Después de acabar de ver el castillo y subir a la torre para hacer unas bonitas fotos de la ciudad decidí marcharme a comer algo y a resguardarme del mal tiempo. La nieve caía sin parar  y en unos minutos el suelo quedó blanco y resbaladizo por lo que acabé en el suelo en la dichosa cuesta abajo. Cuando recuperé el equilibrio me fui a comer a un restaurante justo al lado del mercadito navideño que me salió por un ojo de la cara y ya di unas vueltas para hacer tiempo para irme a casa, pues me esperaban cuatro horas de viaje. Sobre la 1 de la mañana llegué a Freiburg ni rastro de nieve, tendrán razón que es la parte de Alemania que mejor tiempo hace ?!.  Y con un feliz humor llegué a mi casa, pues llegan las vacaciones de navidad y no hay nada que me haga más feliz que tres semanas en casa. Empezamos a descontar días… 4 días !!. Y desde aquí espero que tengáis unas felices fiestas y un feliz año nuevo!!!. Y nos vemos después de fiestas si puede ser que no sea en un castillo Alemán!!.