domingo, 14 de noviembre de 2010

La manzana de caramelo asesina

Llega el otoño en Friburgo y consigo también llega la feria del pueblo. Una feria grande, hermosa a simple vista inofensiva en la que los niños juegan mientras que los padres comen salchichas. No había nada de peligroso en ir y tenía ganas de subirme a alguna atracción para quitarme todos los nervios que llevaba (y llevo) acumulados. Me dirigí a la feria y todo parecía normal, la gente disfrutaba en las atracciones gritaban y reían y los que no comían salchichas. Di una vuelta para ver los puestecitos y allí estaba la manzana de caramelo más hermosa y resplandeciente que jamás había visto. Quien iba a saber lo peligrosa que podría llegar a ser?. Me acerqué a la vendedora y le pregunté cuánto cuesta y me dijo un euro. No podía ser bonito y barato. Mi suerte habría cambiado?. Los huevos míos !!. Con perdón !!.

Hice un comentario muy de los míos, me comeré el caramelo y cuando llegue a la parte sana la tiraré. Debió oírme porque fue metérmela en la boca  y cuando me la quise quitar no podía !!. Se me había enganchado la muy desgraciada en toda la dentadura !!. No podía ser real. Intenté suavemente tirar del palo y nada no había manera. Ya me empezaba a enfadar y tiré fuertemente del palo. Con eso se debería soltar de mis bonitos dientes pensé yo en mi ignorancia. Pero qué va !!, allí estaba yo con la manzana en la boca y el palo en la mano. La manzana estaba enganchada bien enganchada y sin palo tenía que buscar un plan B, tenía que pensar rápido pues no quedaba muy bien una persona en medio de la feria con una manzana pegada en toda la boca. Al final me decidí y la cogí con toda mi mano y volví a hacer la misma operación, tiré, y tiré por un momento pensé que mis dientes se irían con la manzana pero nooo, había ganado conseguí sacármela de la boca. O no?.  Pues no !!, porque ahora se me había enganchado en la mano. Zarandeaba la mano, arriba, abajo con muchísima pena porque la manzana estaba muy rica pero que va la desgraciada estaba bien pegada, bien pegada. No harán la manzana con pegamento no? o peor aún con cemento armado. Yo ya no sabía que hacer, la manzana no se movía de la mano. Por lo que usé la única extremidad que me quedaba servible, la otra mano. La cogí con la otra mano y por fin liberé la mano donde estaba pegada !!. Había ganado yo !!. Que va, se volvió a enganchar en la otra !!. No podía hacer nada, la manzana me estaba venciendo. Y allí estaba ella pegada en mi mano pero estaba tan dulce, nyam, nyam. Estaba toda yo llena de caramelo rojo las manos, la caraaa. Pero me miraba y como la manzana de Blancanieves me decía dame un mordisquito. Como la manzana es la fruta de la tentación, cogí y salvo los ataques que me dio, aún pegada en mi otra mano le di un mordisquito. Eso ya fue el nova más se me volvió a quedar pegada en la boca y ahora también en la mano, lo que faltaba !!. Estaba completamente pegada pero eso si que rica estaba. Pero ya había llegado la gota que colmó el vaso, no habría miramientos, una manzana no me puede ganar la guerra. Después de saborearla un ratillo con toda la mandíbula abierta toda llena de caramelo, es que os he dicho que estaba muy rica ??. pues cogí toda mi fuerza interior y de voluntad que tenía y ahora si iba a salvar mi vida. Apreté bien mis manos, total ya estaba toda guarra por un poquito más y tiré con todas mis fuerzas. Ahora si que estaba bien pegada a mi mano, al tirar casi se me lleva los dientes pero no me importó, era ella o yo. No se lo esperaba dicha reacción y la pille desprevenida. Me dije un mordisquito más... pero una fuerza interior surgió en mi y .... nada porque me la volví a meter en la boca, que buena estaba por dios. Al final como no podía cerrar la boca y no me quería ahogar volví a tirar con mi mano fuertemente y la conseguí desencajar de mi boca nuevamente. Ahora me faltaba lo peor sacarla de mi mano pero ya no para seguir comiéndomela sino para vencer el duelo. Me dolió más a ella que a mí, porque os he dicho que estaba muy rica??. Pues nada ya no había extremidad que valga, cogí mi mano y empecé otra vez a zarandearla arriba y abajo cada vez más abruptamente. Ya no había quien me parara, la pillé tan desprevenida, pues era un poco creída la manzana, que al fin, al fin cayó al suelo. Me fui sin mirar atrás, no podía mirar, no podía, pero que rica estaba por dios. Tenía mis manos rojas, pero rojas, rojas, al igual que mi boca roja, roja parecía un vampiro diurno que acaba de cazar a su presa, pero los que habían visto la escena en mitad de la feria sabían la verdad, una manzana de caramelo me había atacado.

Ahora ya recuperada del incidente, os doy un consejo mis queridos amigos, las manzanas de caramelo matan, al menos las de aquí que deben estar hechas de pegamento o algo así. Por lo que si os ofrecen manzana de caramelo simplemente decid no !!. Porque si las probáis estáis perdidos, de ahí que sea el fruto de la tentación !!. Eso si estaba rica, rica !!.

1 comentario:

  1. Jajajaja madre mía con la manzana! Como bien dices las deben hacer de pegamento eh? Pero saborear ese toque dulce del caramelo que rodea la manzana, mmm, se hace la boca agua eh! Ahora ya sabes: no más manzanas alemanas! ;)

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